Turismo Responsable, una oportunidad para el sector
Existe un sector de la economía mundial que tiene una gran incidencia en la creación de valores de responsabilidad social. No vende golosinas ni automóviles. Su objeto comercial es ofrecer un servicio de ocio.
En 2005, este sector prestó sus servicios a 808 millones de personas, y se estima que para 2020 sean 2 mil millones los agraciados. Estamos hablando nada menos que del turismo y su rol en la construcción de un turista más responsable.
En 1999, la Organización Mundial del Turismo (OMT) aprobó el Código del Turista Ético a través del cual recomienda al turista ciertas pautas de comportamiento sostenible cada vez que visite un lugar.
En el mundo, existe ciertos destinos que son considerados de manera especial por los atractivos que ofrecen. África, Oriente Medio, y en Sudamérica, la Ruta Incaica y las regiones Argentinas (NOA, Cataratas del Iguazú, Cuyo y Patagonia) son parte de los 15 lugares que eligen estos millones de turistas para realizar un turismo activo, diametralmente opuesto a quedarse recostado en una reposera tomando el sol caribeño.
Pero quienes se dedican a organizar este tipo de turismo, que busca preservar el entorno, conocer las costumbres de cada lugar y participar en sus tradiciones, saben que no todos están preparados para ejercer de turistas responsables.
En Argentina, este negocio está orientado básicamente para el turismo exterior, aquellos que visitan el país desde otros continentes o países de América.
Esto es lo que confirmó Sergio Pappatico, de la Agencia «La tierra como solía ser», a RSE Online vía telefónica. Si bien sostiene que «el turismo responsable es un término que está de moda», en su agencia promueven esta cultura turista entre sus clientes que provienen básicamente del exterior.
Pappatico dice que antes que saber por las costumbres locales, los turistas preguntan por la seguridad, «y por suerte se van con otra imagen, distinta a la que les venden en sus países de origen». En cuanto a las conductas, el director de esta agencia dice que «el público europeo es más cuidadoso del entorno, no así los norteamericanos y latinos». Esta percepción la obtiene a través de sus guías que recorren las principales ciudades del país (Buenos Aires y Calafate aparecen como las más elegidas) con quienes vienen a realizar un turismo activo.
Muchos de estos lugares son los que ahora también conocemos como «Ciudades Slow». En Argentina el ejemplo es Tilcara, en la Quebrada de Humahuaca, provincia de Jujuy. En Uruguay, una ciudad de este tipo puede ser Cabo Polonio, donde no hay energía eléctrica y todos deben llevar un ritmo más relajado de vida, aunque en las vacaciones -por la moda esteña- cada vez van más personas y eso ya comenzó a molestar a los lugareños.
En la Cámara Argentina de Turismo, por estos días, están de viaje… y la percepción sugiere que no están muy interesados en el tema. En España, que recibe 55 millones de turistas por año, recién está despegando esta tendencia.
«El turista responsable viaja en grupos reducidos, huye de grandes cadenas y si la calidad del servicio lo permite, utiliza proveedores locales», explicó a La Vanguardia Alex Poo, de Viatges Tuareg.
Las empresas del sector turístico (hoteles, agencias de viajes, aerocomerciales, etc.) deberían comenzar a marcar un liderazgo comunicando y educando a sus clientes respecto de lo que ha pautado la OMT.
Todos los actores de este sector tienen el reto por delante. Explotar los recursos naturales con conciencia turística podría ser el punto de partida de una nueva campaña publicitaria o una actitud para marcar el camino de la responsabilidad social que les cabe.
- El próximo 23 de mayo se realizará en Barcelona el XVI Simposio Internacional de Turismo y Ocio organizado por la escuela de negocios ESADE. Más info en http://www.esade.es/institution/institutos/cedit/index.php
¿Te gustó lo que leíste? ¿Tenés otra visión para aportar? Por qué no dejás un comentario abajo y continuás la conversación, o te suscribís a mi feed y lees artículos como este enviados a tu lector de feeds.
[…] en torno a los Principios de RSE para el Turismo, que como explicó la funcionaria, tienen anclaje en normas internacionales y normas ya establecidas por ese órgano de gobierno que “bajan” a los empresarios del sector a través de […]